domingo, 20 de noviembre de 2011

Wall Street.

~ La noche encapotó el cielo de Wall Street, acercando a Samantha sus más lejanos fantasmas, sus queridos fantasmas del pasado. Ya no importaba hacia donde o cuando, tan solo echó a caminar, bajo aquellos copos de nieve que en fusión con sus lágrimas, le nublaban la vista por completo. "El tiempo no es efímero si tú no estás conmigo para verlo pasar"- se susurraba a si misma entre llantos de silencio. Se preguntaba porque la distancia hacía ascuas entre ambos, ¿porque un beso quemaba tanto si el amor era más que un roce?. Quien sabe, el amor es la incertidumbre de no saber que pasará mañana, tan solo la esperanza es la magia de conservarlo un día más.
A pocas zancadas estaría en el lugar que sin buscarlo ni quererlo, era su lugar de meditación, donde los pensamientos y los sentimientos, dialogaban sin disputa alguna. Cayó, cayó sin pensárselo dos veces, en aquel montón de nieve en la cuál la primavera pasada era suave hierba la que acariciaba su piel. "Es increible, la sensación de estar en el lugar en el que tú estabas aquél día, aquella primavera, y podría jurar que si exhalo tu nombre entre gritos de agonía, volverías de aquella guerra, tan solo para salvarme".

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Tan solo un cuarto de cuantísimo has dado por mi... Te amo mi vida.

~ Aún lo recuerdo, el ir a conocer a tus "amigos", como todos se giraron a mirarme mal, a criticarme, a meterse conmigo y a ti lo único que se te ocurrió, fue cogerme de la mano, darles la espalda, y besarme. ¿Recuerdas cuántas veces he tropezado y tú has sido quién me levantó?. Yo sí. En cada una de mis caídas ahí has estado tú, tendiéndome la mano, recordándome a cada paso en falso, que tú jamás me fallarías. Cuánta gente se metió conmigo por mi físico, dejaste tus estudios para poder venir a recogerme al colegio y que yo pudiese tener el valor de ir cada día a ese lugar... pero valía la pena, sabía que al salir, tú estarías ahí, esperándome. Recuerdo tus llantos por teléfono, diciéndome que no aguantabas más a tu padre, y tú al confesarme que era porque se metía conmigo por estar gorda... las veces que te has enfrentado a él por defenderme, diciéndole que yo era la mujer de tu vida, qué eras lo que más habías querido jamás y que no permitirías que alguien como él, me hiciese llorar así... Te fuiste aquél verano casi un mes a Valladolid, aún recuerdo tu rostro abrazándome con todas tus fuerzas en aquella playa, suplicando a algo que no existía que te retuviese junto a mi. Recuerdo cuatro horas diarias al teléfono y otras cuatro tras haber colgado llorando... Me recuerdas cada día que soy tu primera vez, tu primer amor, y qué estás ahorrando para ese tatuaje, aquél con nuestra frase en el pecho que te quieres hacer, junto con mi nombre que coincida encima del corazón, donde según tú, resido yo en tu cuerpo. Para ti soy como aquél tatuaje, algo que esperas que sea para siempre, y por mi parte, será como un tatuaje y más que eso. Sí, se me olvidaba. Aquél día de lluvia, tus padres te obligaron a ir al chalet de tus tíos a comer, y yo necesitaba verte, pero como de costumbre, tu padre no te dejaba venir tan tarde...¿qué importaba? cogiste aquél bus a las 9 de la noche, fuiste me compraste un osito de peluche gigante, y empapado con el oso en brazos, apareciste en la puerta de mi casa... Me recuerdas cada día que quieres casarte conmigo, qué si no fuese tan pequeña, sin duda alguna lo harías. Me has visto de todas las maneras posibles, sin peinar, con ojeras, en pijama, enferma... y no ha habido día, en el que tú no me dijeras: "No lo entiendo, pero cada día te veo más preciosa...". Noches que llorando te he necesitado y has aparecido a las 11 en la puerta de mi casa, llorando pidiendo perdón, diciendo que te quedarías en mi portal a dormir si hacía falta, contad de estar cerca de mi... Has vuelto a tus estudios solo porque dices que quieres darme algún día de mayores, la vida que merezco.Y ahora dime, si no me mereces, porque eres todo cuanto una persona puede desear. Eres mi sueño hecho realidad Javier, y me demuestras cada día, que tú eres para siempre.

lunes, 14 de noviembre de 2011

Pesadillas.

- Las horas parecian no querer cesar, y su recuerdo parecía no querer marcharse con el paso de las horas. La ténue luz de las farolas aquella madrugada, le hacía recordar aquella noche bajo la lluvia, en la que un paraguas para dos, era el mejor refugio un día como ese, en un lugar como aquél. El olor a hierba mojada, la llema de los dedos caminando por una barandilla cualquiera, mientras sus dedos caminan por su cuello, cual escalofrío una noche de verano al notar la suave brisa de la mañana. Dar vueltas en la cama no servía , su recuerdo era inmune al olvido, su rostro era lo más cercano a lo divino que jamás fue conocido ... su mente lo sabía,su corazón lo reconocía. Esas sudaderas peculiares que le caracterizaban, esa dura pose que no hacía más que hacerle más tierno a ojos de una pobre enamorada, esa sonrisa que parecía pedir a gritos; " No me olvides nunca".

domingo, 13 de noviembre de 2011

Abre los ojos.

~ Soy de las pocas personas que te podrían ayudar pero no te dejas. Soy de las personas a las que más le duele que no abras los ojos aún dandote de frente siempre con la misma piedra, más que piedra la misma persona. No puedo ayudarte si no me dejas pero sigo sin rendirme, aunque no sepas quien soy. Si lees esta página y sigues pensando del mismo modo sobre la persona en la que estás será lo último que intente hacer para ayudarte, pero tú misma verás de quien vas de la mano, que ahora no es el problema, es el mañana que te espera sabiendo como están llendo ya las cosas.
Te quiero, amiga. 

sábado, 12 de noviembre de 2011

Nadie.

- Su voz era un eco que penetraba en su oído una y otra vez, para anclarse en su mente, haciendo ecos de " jamás te dejaré sola, lo prometo ". Su corazón lo sabía, apostó todas sus cartas, pero quién sabe si era esa mirada de ojos tochos que se rememoraba en su cabeza una y otra vez, esas tardes de verano anclados en la arena, haciendo de un abrazo, el mejor abrigo cuando el sol comenzaba a caer. Sería ese aroma que se inpregnaba en la ropa en cada abrazo que él la regalaba, serían esas infinitas veces en las que él lloró al lado del teléfono, por el simple hecho de verla llorar y no poder abrazarla. Sería el simple hecho de que jamás pensó en enamorarse como la primera vez, y la segunda, superó todas sus espectativas,conociéndole. Sería el simple hecho de que le tenía celos al aire que respiraba, por el simple hecho de poder estar con él en todo momento. Sería el simple hecho de qué sobre el corazón, nadie manda.









viernes, 11 de noviembre de 2011

Te echaré de menos... aunque sea tarde.

~ Las horas muertas se anclan en un dolor punzante que no sabe por donde escapar, será la conciencia intentando salir. Suelen decir que el ser humano no sabe lo que tiene hasta que lo pierde y ese dicho en mi vida cobra sentido en días como estos... No quiero tecnicismos en este texto, tan siquiera plasmar una historia... tan solo poder decir en un par de líneas cuantas cosas querría haber dicho si él me entendiese.


Recuerdo el primer día que te trajeron a casa... te había pedido tantísimas veces y al fin te tenía. Eras mi leoncito, mi pequeño Simba, ¿recuerdas?. Duele pensar en que me gustaría pedirte perdón por no haberte tratado como merecías, y sin embargo, ahora que sé que te estoy perdiendo llevo más de una hora llorando... la madrugada se cierne sobre mi y tan siquiera me importa... sé que si no es ahora será más tarde, pero la angustia no desaparecerá  una vez que tú ya no estés aquí... Me gustaría poder preguntarte si aunque vayas a tener nuevos dueños te acordarás de mi, aunque sea de las pocas cosas buenas, si algún día te volviese a ver correrías hasta donde alcanzase la vista y parases y te girases como hacías.. para asegurarte de que aún iba contigo... Me gustaría poder escribir uno de mis textos, haciendo historias inventadas pero no puedo de verdad... Son casi las cuatro de la madrugada y solo pienso que en escasos días me asomaré a la ventana y ya no estarás, en que ya no tendré que salir para regañarte porque ladras a los vecinos, o simplemente ya no saltarás de alegría al verme aparecer por el salón... Ojalá nunca me olvides como yo haré contigo... Lo siento pequeño... Ojalá pudieses entenderme cuando te hablo... Siempre te querré....

jueves, 10 de noviembre de 2011

Aquél día... ♥

- Dirección hacía el cielo su mirada estaba inmersa en un mundo al cual ella no pertenecía. Por la comisura de sus labios asomaba aquella pequeña pero diferenciada sonrisa, qué pintaba su cara de idiota, cuando él rondaba su mente. "Es sencillamente perfecto"- se decía entre suspiros. El cielo estaba más oscuro qué nunca, la luna gobernaba aquella noche, y tan solo el chapoteo del agua rompia el sonido de aquellos fugaces besos. "Siempre serás mi niña"- a escondidas de los familiares le decía. Era imposible, no sonrojarse, no enamorarse, no quererle cada día más. No importaba donde o cuando, sencillamente el paraíso, está donde él esté.