~ Las horas muertas se anclan en un dolor punzante que no sabe por donde escapar, será la conciencia intentando salir. Suelen decir que el ser humano no sabe lo que tiene hasta que lo pierde y ese dicho en mi vida cobra sentido en días como estos... No quiero tecnicismos en este texto, tan siquiera plasmar una historia... tan solo poder decir en un par de líneas cuantas cosas querría haber dicho si él me entendiese.
Recuerdo el primer día que te trajeron a casa... te había pedido tantísimas veces y al fin te tenía. Eras mi leoncito, mi pequeño Simba, ¿recuerdas?. Duele pensar en que me gustaría pedirte perdón por no haberte tratado como merecías, y sin embargo, ahora que sé que te estoy perdiendo llevo más de una hora llorando... la madrugada se cierne sobre mi y tan siquiera me importa... sé que si no es ahora será más tarde, pero la angustia no desaparecerá una vez que tú ya no estés aquí... Me gustaría poder preguntarte si aunque vayas a tener nuevos dueños te acordarás de mi, aunque sea de las pocas cosas buenas, si algún día te volviese a ver correrías hasta donde alcanzase la vista y parases y te girases como hacías.. para asegurarte de que aún iba contigo... Me gustaría poder escribir uno de mis textos, haciendo historias inventadas pero no puedo de verdad... Son casi las cuatro de la madrugada y solo pienso que en escasos días me asomaré a la ventana y ya no estarás, en que ya no tendré que salir para regañarte porque ladras a los vecinos, o simplemente ya no saltarás de alegría al verme aparecer por el salón... Ojalá nunca me olvides como yo haré contigo... Lo siento pequeño... Ojalá pudieses entenderme cuando te hablo... Siempre te querré....
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.